Con más de 35 años de historia, la Fiesta del Agua daba en la tarde del jueves el pistoletazo de salida a la Feria y Fiestas Patronales 2022, tras dos años de ausencia obligados por la pandemia. 50.000 litros de agua no potable que sirvieron para aliviar las altas temperaturas del verano.
Centenares de vecinos y visitantes venidos desde distintos puntos de Andalucía e incluso del extranjero, algunos ya habituales en esta concentración de agua en la Plaza Amarilla y otros atraídos por la curiosidad de no querer perderse esta singular batalla en la que la única arma son los cubos, se dieron cita en nuestro pueblo, y de la que muy pocos consiguieron salir secos.